En diálogo con Pase lo que Pase por Radio Provincia AM1270 explicó que “hay un plan sistemático del Gobierno en haber elegido a la pesca como uno de los tantos enemigos que definió tener”, y en ese marco, “empezó una combinación negativa de factores que afectan al sector” por un lado internos “con el incremento impositivo de las tasas de captura, de los costos de combustible y producción” y externos, en relación a la caída de los precios internacionales. “Al no ser Argentina formadora de precios, hay un combo que hace que el sector haya perdido rentabilidad a niveles históricos y muchas fábricas empiezan a cerrar”, advirtió.
Seguido, comentó que la Cámara Langostinera Fresquera, solicitará a través de los gremios la quita de retenciones al sector, “entendiendo que el nivel de divisas no es sustancial y no pone en jaque el tesoro fiscal como sucedería con la soja”. Falconnat explicó que con ello se busca custodiar “el bien supremo, la fuente de trabajo que genera la actividad que tiene un cadena de valor que emplea cerca de 45 mil personas en forma directa”. En ese sentido, remarcó que “es lo que tenemos que preservar, porque cuando baja la persiana de la planta no hay manera de reciclar rápidamente a esa gente, porque son oficios muy específicos”.
Consultado respecto a las motivaciones de Milei por vaciar un rubro que genera ganancias y empleo, consideró que “en un país que tiene más territorio marítimo que terrestre, descuidar la pesca es descuidar la soberanía. Y es una receta que vienen aplicando los neoliberales en sectores productivos” y recordó que “un capítulo de la Ley Bases planteaba destrozar la pesca”. Con ello “quieren que baje la actividad, justificar que hay pescado que no se captura, que son dólares que no ingresan, y con esa excusa, habilitar el ingreso de flotas extranjeras. Es un recurso que si no lo cuidamos pone en riesgo a las futuras generaciones”, concluyó.